El miércoles 17 de junio recién pasado se dio a conocer en Francia un estudio sobre una materia poco atendida pero altamente relevante: la presencia de pesticidas en el agua potable. Pero hablar de “pesticidas” es vago. Se trata de agrotóxicos -productos químicos empleados en labores agrícolas- que, en rigor, se deben definir como perturbadores endocrinos (PE), cancerígenos mutágenos y reprotóxicos . Estos productos ampliamente utilizados en casi todo el mundo (según la legislación imperante en cada país, como veremos más adelante) concentran sus efectos nocivos en la salud humana y de los organismos vivos en esos tres aspectos: alterando el normal funcionamiento de las glándulas endocrinas lo que genera un desequilibrio hormonal, aumentando la mutación celular propiciando la aparición de cáncer y alterando la fertilidad. El estudio dado a conocer esta semana, llevado a cabo por la ONG Générations Futures , arrojó resultados alarmantes, detectándose una pr...
Desde el litoral